Comités de Productores de Cuyes integrados por familias del distrito de Mòrrope, asesorados por el Proyecto Especial Olmos Tinajones – PEOT emprenden un nuevo reto, comercialización sostenida de su producción.
Según precisó, Deysi Álamo Tejada, responsable de la oficina del PEOT en Mórrope, insertar a las productoras de cuyes al mercado local no ha sido fácil, “al inicio como solamente invertían y no obtenían ganancias muchas se desanimaron, sin embargo con los que quedaron hemos continuado trabajando y desde el año pasado empezamos a vender cuyes pelados y cuyes preparados a los trabajadores del PEOT, como vieron que sí es rentable la producción de cuyes decidieron continuar”, explicó.
Dijo que gracias al incremento de la producción, próximamente empezarán abastecer al restaurante
La Casa del Cuy, “entregaremos quincenalmente 30 cuyes vivos de un kilo, la responsable de cada comité se encargará de acopiarlos entre sus asociados, detalló la profesional del Proyecto Olmos Tinajones.
Deysi Álamo Tejada explicó que en el año 2010, el PEOT en su afán de generar un desarrollo económico y social en la zona, asumió la tarea de asociar y capacitar a las familias de los caseríos; El Romero, La Colorada, Cruz del Médano, Hornitos y Lagunas, para mejorar la crianza de cuyes.
Agregó que la capacitación a los más de 100 miembros que integran los 5 Comités de Productores de Cuyes estuvo a cargo de profesionales del Ministerio de Agricultura, quienes impartieron charlas sobre el mejoramiento genético de cuyes, prácticas adecuadas de sistemas de alimentación, manejo sanitario y competitividad de la cadena de cuyes.
Además también se orientó a cada uno de los Comités de Productores de Cuyes en cómo articular su producción al mercado local y el manejo de costos de producción, por lo que hoy están aptas para incursionar en el negocio propio y obtener recursos económicos que les permitirá mejorar la calidad de vida de sus familias.
DATOS.
La carne de cuy se caracteriza por ser una carne rica en proteínas (21%) y a la vez pobre en grasas (7%), ofreciendo una serie de beneficios nutricionales para quien lo consume. Su bajo contenido en grasas lo hace consumible por personas que padecen de obesidad y enfermedades cardiovasculares (siempre y cuando su ingesta sea con moderación).
El consumo de carne de cuy responde a la gran demanda actual por aquellos productos de mínimo aporte calórico y bajo contenido graso.
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