El 70% de las personas hambrientas del mundo viven en zonas rurales y en todo el planeta los pequeños productores son más propensos a sufrir la inseguridad alimentaria, a causa de su precario e insuficiente acceso a los alimentos. Según las proyecciones de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO),
Considerando el pronóstico que para el año 2050 la población mundial superará los 9 mil millones de personas, la FAO calculó que para alimentar y mantener en buena salud a esa población la producción agrícola tendrá que crecer en un 70%.
Además, es importante tener en consideración que más del 70% de las personas en situación de extrema pobreza viven en zonas rurales. Asimismo, en todo el planeta, son los pequeños productores los más propensos a sufrir la inseguridad alimentaria, a causa de su precario e insuficiente acceso a los alimentos.
En ese sentido, Modibo Traoré, subdirector general del Departamento de Agricultura y Protección del Consumidor de la FAO señaló que “los miembros estratégicos de la institución americana han resaltado la necesidad de mejorar la productividad de los pequeños agricultores, promoviendo inversiones públicas y privadas más eficaces en la agricultura y el desarrollo rural”.
Asimismo, afirmó que para la FAO es fundamental invertir en investigaciones apropiadas que garanticen el acceso a los pequeños agricultores a las innovaciones desarrolladas, que puedan acceder a un crédito con tasas apropiadas, que cuenten con títulos de propiedad, con vías de comunicación eficientes y oportunidades para la comercialización, asegurando ganancias apropiadas y de esta manera invertir en estrategias sensatas que hagan de su agricultura sostenible.
Traoré sostuvo que “la función del Estado es de promulgar y hacer cumplir una reglamentación que establezca el tipo de entorno seguro y capaz de atraer a las inversiones. Esto implica que los productores agrícolas deberán estar en condiciones de cumplir con las normas de calidad de los alimentos mediante la adopción de buenas practicas de cultivo, respaldada por la certificación y la inspección; el apoyo a la investigación y la extensión en el ámbito local”.
“Además de la mejora de los transportes, las infraestructuras de comercialización, el suministro de oportunidades de formación y el aumento de sus capacidades que permitan disponer de los recursos humanos necesarios para aplicar y poner en funcionamiento los sistemas de apoyo a la agricultura”.
En este contexto, las inversiones de la comunidad internacional, los donantes y el sector comercial privado podrán estimular a los agricultores del sector privado, así como a los gobiernos al respaldar programas de desarrollo agrícola que mejoren la producción y las oportunidades de comercialización, indicó el ejecutivo.
Inversiones
Para Modibo Traoré, los inversores establecen sus prioridades en función de circunstancias que varían de un país a otro, o incluso dentro del mismo país. Las necesidades de inversión de un país dependerán de factores tales como su tamaño, su población y el nivel de desarrollo tanto de su economía y su infraestructura, como de su sector agrícola y sus empresas agrarias.
Por otra parte existen también “factores limitantes” que deben tenerse en cuenta en cualquier plan de inversión. Estos pueden ser, en una zona determinada, los recursos hídricos; en otra, la calidad de las semillas, la prevalencia de enfermedades o plagas transfronterizas, o la falta de instalaciones para el almacenamiento de postcosecha.
En ese sentido, el ejecutivo resaltó “es fundamental tener en cuenta el panorama general y buscar una combinación de respuestas. Quienes tienen agua necesitarán además fertilizantes, los cuales aportarán el máximo beneficio si se aplican a las semillas apropiadas. La generación y transferencia de conocimientos tienen sus costos, y las mejores prácticas pueden cambiar con el tiempo. Para determinar los objetivos y obtener el mayor rendimiento posible de la inversión es necesario tener en cuenta todos los factores y actores de la cadena productiva”.
Finalmente, Traoré precisó que así como ha crecido la conciencia de la importancia decisiva de la agricultura y la producción agrícola, se ha acrecentado también el interés de la comunidad internacional y la voluntad política de orientar la inversión hacia la agricultura.
Los resúmenes que se presentarán son respaldados por el estudio realizado por la FAO que tiene como propósito ofrecer a los interesados directos, a todos los niveles, una nueva visión de las opciones de inversión disponibles.
(agraria)
0 comentarios:
Publicar un comentario